Proximo concierto


Una incógnita total. Verán nombres nuevos y pueden confiar en que yo también los desconozco. Son propuestas muy diferentes (poperas, casi todas), la invitación me llegó de rebote y estoy más con la intención de escucharlos por ver la propuesta de otros cantautores, y no por el gran interés de descubrir al nuevo Camila o Kalimba o Camilba. 

Ojalá puedan ir. Sé que varios de los que van no quedan del todo satisfechos porque luego nuestros rollos troveros están bien fumarolas y no entienden la mitad de las canciones; puede que esta sea una propuesta más interesante para esos.

Por cierto, seré el primero en tocar, así que si van por verme lleguen temprano, porque luego me caga que me caguen el palo por "no tocar más al rato". Invita'os, pues.

Saludos

Iván

Cada vez más, cada vez menos

No sé si será la escuela o algo peor, pero cada vez sufro más para relacionarme con los demás. O al menos carezco de intención de convivir con los demás.

Pongo a la escuela como principal sospechosa considerando que un 65% de mi día gira en torno a matemáticas, a la tarea, al material, a las fórmulas. Parte de lo sobrante lo dedico a mi novia, ya sea presencialmente o pensándola. Otro resto del día se me va en mis vicios necesarios como leer aunque sea un poco, ver un noticiero de noticias (ajá) y otro de deportes, dedicarme media hora de silencio antes de dormir para pensar o poner mi mente en blanco. O rojo. Escuchar media hora de música, de la que sea, de las que no me sepa para seguir conociendo (se aceptan sugerencias).

Eso me deja poco tiempo para "lo demás". Y eso demás va encabezado por mi música, que en relación al gusto que me deja, la trato muy mal. Y mi familia, que no exige convivencia pero yo, por costumbre quizá, me exijo convivir con ellos como un ejercicio de auto-reconocimiento, además de los buenos ratos que eso trae.

O sea que al final de todo eso, de mi egoísta repartición de tiempo, queda ese pequeño esfuerzo por convivir con las amistades, con los conocidos, con los demás cantautores. No es falta de interés, sólo que ese interés se me está quedando muy corto comparado con la intención.

Me pesa hablar por teléfono porque me quita tiempo. Ir al grupo es un escaparate excelente porque está "agendado", es una convivencia que me gusta y me prometo cada que va terminando la semana. Fuera de eso, me ha sido inevitable últimamente tener conversaciones con gente, sin estar pensando en qué debería estar haciendo en ese momento o qué haré al terminar.

No es queja. Creo que si esta forma de vivir los días no me gustara, haría algo para suspenderla. Sólo que es algo curioso. Me gusta estar solo, acaso cada vez más. O será que estar acompañado me gusta cada vez menos... sé que mi pérdida de capacidad mencionada sé refleja en mis actos; se vuelve constante que la gente en algún momento se sienta agredida por algún comentario, o simplemente ponga cara de "Ash, tú no tienes ganas de estar aquí".

Meh. Si el día tuviera 26 horas, otra cosa sería. 

Saludos. 

Iván

Próximo evento.

Viernes 16 de Abril, en Cafeto. 8:00 PM, entrada libre. Milton Rodríguez, Iván Ramírez y Raúl Fernando.

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